Estrechar los lazos regionales para mitigar los efectos del COVID-19

Si bien aplanar la curva de crecimiento de infectados de COVID-19 es el camino que han adoptado la mayoría de los países, un equipo de profesionales paraguayos, integrado por el Dr. Carlos Torras y los ingenieros Claudio Rojas, Diego Bentel y Roque Ardissone, decidió trabajar en alternativas para aumentar la capacidad hospitalaria y mejorar la calidad de atención del sistema de salud.

De esta manera, los especialistas diseñaron una solución programática para ampliar la capacidad del sistema hospitalario existente, que se pudiera materializar rápidamente, a un costo relativamente bajo y con materiales disponibles en el país. De forma solidaria y colaborativa, aprovechando las redes de contacto y su pericia en el área, participa del proyecto la empresa uruguaya de ingeniería Ingenium.

El proyecto consiste en crear, en no más de 30 días, salas de internación provisorias anexas a los hospitales centrales existentes en el territorio paraguayo. El objetivo es que los hospitales cuenten con hasta 100 camas extras para personas que requieran de cuidados leves e intermedios. Se trata de soluciones modulares, cada una con capacidad para alojar hasta 16 personas, subdivisibles en espacios de 8 camas. Además, las instalaciones contarán con salas de enfermería y estarán conectadas mediante un pasillo de servicios técnicos al módulo de médicos con 36 camas adicionales.

“No se trata de construcciones de altas prestaciones, ni previstas para ser permanentes, sino soluciones provisorias que cumplan satisfactoriamente con su cometido durante la pandemia. El proyecto busca que estas instalaciones tengan el mejor desempeño posible dados los materiales disponibles”, explicó el ingeniero y fundador de Ingenium, Facundo del Castillo.

Ingenium es una empresa especializada en ingeniería estructural fundada en 2011, con presencia en varios países de la región y en España. Desde 2015 está inserta en el rubro de ingeniería en Paraguay, donde ha formado vínculos estrechos con algunos clientes que trascienden la estricta relación proveedor-cliente y con los que están en permanente contacto.

“Cuando nos convocaron para hacernos consultas específicas pusimos a disposición nuestra capacidad para colaborar de manera honoraria en el proyecto”, señaló del Castillo. Ingenium estudió la viabilidad de las distintas soluciones constructivas y le dio un soporte estructural al proyecto, es decir, creó un diseño estructural con los materiales disponibles para lograr el mejor desempeño y la optimización de los recursos.

El ingeniero contó que cuando llegó la propuesta para colaborar con el proyecto paraguayo no lo dudaron. “No es fácil encontrar la forma de contribuir en esta situación, pero cuando aparece un proyecto de rápida aplicación, con el apoyo de un gobierno que lo adopta y que pone a disposición los fondos para ejecutarlos, surge una oportunidad excelente para aportar nuestro granito de arena. Tener la oportunidad de dedicar parte del trabajo que hacemos a esta causa es de plena satisfacción”, señaló.