Uruguay celebra su continuidad democrática y estabilidad con la asunción de Yamandú Orsi a la presidencia

Uruguay celebró una nueva transición de poder con la asunción de Yamandú Orsi como presidente de la República. Con una ceremonia en el Palacio Legislativo y la Plaza Independencia de Montevideo, Orsi juró como el 43º presidente del país, sucediendo a Luis Lacalle Pou y en presencia de una nutrida delegación de mandatarios internacionales y líderes políticos, hecho que destacó la solidez institucional del país. Su mandato, que se extenderá hasta el 2030, representa no solo la continuidad de un sistema democrático robusto, sino también el compromiso con el desarrollo sostenible de Uruguay.

Yamandú Orsi nació en el departamento de Canelones en 1967. Fue intendente del departamento de Canelones, lindero con Montevideo, durante nueve años, un período en el que promovió políticas de inclusión social, apoyo a pequeños productores y un fuerte impulso a la protección del medio ambiente. Su experiencia en la gestión pública fue fundamental para su victoria en las elecciones de 2024, cuando fue elegido presidente con el 49,8% de los votos en la segunda vuelta, junto a su compañera de fórmula, la ingeniera y exintendenta de Montevideo, Carolina Cosse, quien asumió la vicepresidencia.

En su discurso de asunción, Orsi subrayó el valor de la democracia uruguaya y su estabilidad institucional. "Cada cinco años los ciudadanos han elegido a sus gobernantes en una fiesta cívica que enorgullece la república. Este es un país de partidos políticos, de alternancia en el poder, de acuerdos. Un país en el que la confianza sigue siendo un elemento central para su funcionamiento. Por eso decimos que el Uruguay funciona", expresó.

Además, agradeció a los expresidentes de las últimas cuatro décadas —Julio María Sanguinetti, Luis Alberto Lacalle Herrera, José Mujica y el presidente saliente Luis Lacalle Pou, así como de los fallecidos Jorge Batlle y Tabaré Vázquez— por su aporte al fortalecimiento democrático. "Gracias democracia, gracias república, gracias partidos políticos por hacer de este Uruguay una amalgama plural de convivencia que aún despierta asombro en el mundo", resumió.

Orsi destacó que el progreso de Uruguay ha sido posible gracias a una acumulación de logros que han fortalecido los derechos, la cultura, el arte y la ciencia del país. Subrayó que esta construcción sostenida ha consolidado un marco institucional estable, donde se respetan las normas, los contratos se cumplen y el Estado honra sus compromisos. Además, señaló que la estabilidad macroeconómica se ha convertido en una política de Estado desde la restauración democrática, garantizando un funcionamiento previsible de la economía. Finalmente, resaltó que este proceso no solo benefició a Uruguay internamente, sino que también proyecta al país en el ámbito internacional como un ejemplo de paz y estabilidad.

La vicepresidenta Carolina Cosse también resaltó la solidez democrática del país en su intervención: "Hoy sentimos una gran emoción en este momento trascendente, que una vez más, como cada cinco años, le muestra al mundo y a nosotros mismos la salud de nuestra ejemplar democracia".

Una vez finalizado el acto protocolar en el Palacio Legislativo, las nuevas autoridades de gobierno se trasladaron hacia la Plaza Independencia en un vehículo eléctrico, como forma de reafirmar el compromiso del gobierno entrante con la transición energética, un área en la que Uruguay ha logrado avances significativos en los últimos años.

El éxito de la transición energética del país es el resultado de un trabajo conjunto entre todos los partidos políticos, que en 2010 lograron un acuerdo nacional sobre esta política, orientada a la sostenibilidad y la eficiencia. Hoy, la matriz energética de Uruguay es un modelo para la región y el mundo, que la administración de Orsi continuará impulsando.

"Los pilares del Uruguay productivo están sustentados por su pasado, su presente y su futuro. El Uruguay ganadero que viene desde nuestros orígenes, el Uruguay con su soberanía y sustentabilidad energética, el Uruguay de la ciencia, la investigación y la innovación como pilares para el desarrollo y su contribución en la economía basada en el conocimiento", recordó el presidente en su discurso de asunción.

La presencia de mandatarios internacionales en la ceremonia de traspaso de mando, entre ellos los presidentes de Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Bolivia, reforzó la importancia de Uruguay como un ejemplo de democracia estable y creciente en América Latina.

"No comienza un tiempo de refundación, sino uno de nuevas propuestas y de construcción permanente", subrayó Orsi. "Hoy hice un juramento que prometo honrar con dedicación, con escucha atenta, con fervor y con trabajo incansable", agregó.

El presidente cerró su discurso con un mensaje de optimismo y compromiso. "Es tiempo de abrir las puertas a la esperanza con la convicción inquebrantable de un país que sabe cuál es su rumbo, con el legado de los que lucharon y nunca bajaron los brazos. Hoy avanzamos con la fuerza del presente y con la mirada en el futuro. Vamos a construir un mejor Uruguay. Hoy comenzamos", culminó.

Crédito de imágenes: Comunicación de Presidencia